Posadas tiene un hotel cuatro estrellas, que abrió sus puertas el 4 de agosto de 1991 y fue una verdadera revolución en la ciudad por todo lo que ofrecía. Pero el paso del tiempo, las crisis económicas y hasta la competencia del estado, le pasaron factura al Hotel Julio César, que lucha por recuperar sus mejores épocas y ojalá que lo consiga.
Ubicación del Hotel Julio César de Posadas
El Hotel Julio César está ubicado en pleno centro de la ciudad de Posadas, sobre la calle Entre Ríos, entre San Lorenzo y Colón. Originalmente se había planificado allí la construcción de un sanatorio pero, por motivos económicos, fue modificado el proyecto. El nombre elegido para el hotel es un homenaje a un hermano del propietario original, el ingeniero civil Rubén Félix de Alvarenga, que había fallecido en un accidente de tránsito.
Hospedaje en el Hotel Julio César
El hotel se desarrolla en 12 pisos y cuenta con 94 habitaciones, de uno, dos y hasta tres ambientes, entre formato estándar y suites especiales. Además de habitaciones, el hotel también cuenta con 7 salones, con diferente capacidad, para todo tipo de eventos.
Entre otros servicios, el Julio César también ofrece Wifi gratis en todo el hotel, cocheras, y cofres de seguridad.
Habitaciones Hotel Julio César de Posadas
Nosotros nos quedamos en una de las suites de 3 ambientes, que puede albergar hasta 5 personas y está ubicada en el piso 11. Por allí pasa uno de los puntos destacados, porque brinda una vista panorámica de la ciudad, incluyendo el río Paraná y el puente que une a la capital de Misiones con Encarnación, Paraguay.
Pero regresemos al recorrido por la habitación, que en este caso estaba armada como para 4 personas, por eso aparecen 2 camas de una plaza, además de los sillones, un escritorio y un televisor, con conexión a TV por cable.
En el segundo ambiente, que también me permite mostrarles que la habitación tiene muy buena iluminación natural, encontramos una larga mesa, con 6 sillas... un frigobar, jarra para calentar agua y, como gentileza, sobrecitos de té de diferentes sabores.
Con acceso desde este ambiente y desde el dormitorio encontramos el baño, que tiene separado por una puerta el espacio destinado a inodoro, bidet, y un duchero bastante amplio con columna de ducha e hidromasaje. Como ya habíamos visto cuenta con 2 lavamanos, un gran espejo y secador de cabello.
Pasamos ahora a la habitación principal, dominada por una cama de dos plazas. Incluye dos mesitas de luz, un guardarropa que resulta menos generoso en espacio de lo que parece, y me voy a detener por un momento en el aparato de aire acondicionado. No cabe duda de que es un artefacto de la etapa inicial del hotel, que ya está pidiendo cambio, porque nos regalaba un sonido insoportable casi de manera permanente.
No le dieron mayor importancia a mis quejas, ni tampoco a mi pedido de un ventilador. La conclusión es que está proyectado su reemplazo, pero mientras tanto, de nada sirve que estés en una de las que el propio hotel anuncia como sus habitaciones más importantes.
El lugar se completa con un escritorio, que hace las veces de mesa para el televisor y una silla bastante cómoda.
Piscina del Hotel Julio César
La piscina se encuentra ubicada en el segundo piso, es bastante amplia y con diferentes niveles de profundidad. Por encontrarse en una zona de estructuras bajas, ofrece muchas horas de sol.
Servicio de restaurante
Durante nuestra estadía anterior, a fines de diciembre de 2016 y primeros días de 2017, el desayuno se servía en el segundo piso, más precisamente en el Salón Don Rume, donde también funcionaba el restaurante. Nos comentaron que ambos servicios comenzaron a prestarse en la planta baja tras la pandemia de Coronavirus, en un espacio bastante más reducido y por momentos eso se hace sentir.
El restaurante funciona al mediodía y por la noche, con opción de servicio a la habitación. En el video te muestro 3 opciones del menú del restaurante: empanadas de carne (fritas), omelete, y cierro con un espectacular sándwich de lomito.
Desayuno en el Hotel Julio César
Pero vamos a la parte interesante, recorriendo la variada oferta que tiene el desayuno: tortas, pan dulce (recordemos que estábamos en plena época navideña), budines, medialunas y otros panificados, flan, diferentes tipos de cereales, mermeladas y dulce de leche industrial, manteca, la infaltable tostadora, ensalada de frutas, variedad de frutas, y voy a mezclar aquí varias secuencias para que puedan apreciar las mermeladas artesanales y otros dulces regionales.
Seguimos el recorrido para encontrarnos con otras clases de panes, jamón y queso, agua fría y jugo de naranja. En otra mesa ofrecen pizza, tarta de jamón y queso, sopa paraguaya (que es lo que vemos arriba a la izquierda), tarta de choclo y otra cosa que no logré recordar al momento de editar el video. Cabe decir que también suele haber huevos revueltos y salchichas salteadas.
Como no podía ser de otra manera, los pasajeros tienen a disposición café, leche caliente, agua caliente para té, chocolate en polvo, y leche fría.
Con el más sincero deseo de que el Hotel Julio César pueda recuperar el sello de distinción que lo caracterizaba, te recuerdo que puedes encontrar más videos sobre Posadas en mi canal de YouTube, y no olvides suscribirte, es gratis y para mí sería de gran ayuda.
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